Capítulo 7

7mo. capítulo, comienzan las señales....

Borja desayuno rápidamente, subió a su cuarto a armar un bolso y bajo:

-Oye tío, de repente te cambio el ánimo, ¿no qué no querías ir?

-Es que mientras me bañaba me acorde del mar y me entraron unas ganas de ir.

-Venga – Mientras lo miraba alegre al verlo tan entusiasmado - ¿A qué playa prefieres ir?

-Sorpréndeme.

-Vale, tú te lo has buscado.

Salen de la casa y suben al auto:

-Oye, con respecto a lo de ayer, disculpa si me adelante al hablar.

-No hay problema Rafa. Tú sabes que la relación con mis padres no es la mejor y tampoco tengo porque andar dando explicaciones.

-Pero te hubieras visto la cara chaval, ahora no tanto – Mientras lo observa – Pero tenías el ojo morado y no te podías mover. Cualquier cristiano se preocuparía al verte.

Arranca el auto y lo mira como buscando alguna respuesta, pero Borja se quedaba callado.

Créditos imagen Dígame Mallorca

El viaje a la playa fue tranquilo, Borja tenía la ilusión de encontrar un mensaje de Alexia, por eso no quiso elegir el lugar, hasta que llegaron:

-Aquí estamos, Ciutat Jardín.

-Venga, a por las olas.

-Esa es la actitud.

Se bajan del auto mientras observan la playa. Ambos toman el bolso y van caminando tranquilos a la playa mientras charlan:

-¿Has cambiado el móvil? – Pregunta Rafa.

-Sí, es que se me ha roto el anterior. Se me cayó en la calle y lo piso un auto.

-Joder. Porque te estuve llamando ayer pensando que estarías en Madrid.

-Digamos que no me quedo otra que venir…… Para relajarme un poco. Han sido unos días fatales en el trabajo y no podía ni dormir.

-Allí podemos rentar un par de tablas – Le señala Rafa.

Se acercan al dependiente y eligen un par:

-Oye tío, ahí está con la que ganaste el torneo hace 2 años.

-¡Ostras!, quiero esa por favor – Le entra una ilusión a Borja pensando que detrás de esa tabla encontraría una respuesta de Alexia.

Llegan a la playa y Borja mira por todos lados la tabla:

-Oye que haces, es una tabla nomas.

-Es que… Es que…. No sé, no quiero que después me quieran cobrar por algún raspón – Rafa lo mira.

-Ya esta vamos al mar, las olas nos esperan.

Ingresan al tibio mar. Borja sigue esperando la señal, está seguro que aquí va a encontrar algo pero no sabe qué:

-¿Qué te pasa Borja?

-Nada… Solo observo el mar.

-Esa mirada la conozco chaval, no quiero que te agobies. Si te trae malos recuerdos nos vamos.

-No no… Vamos a por las olas.

Llego el momento de subirse a la ola. La adrenalina recorre a ambos. La sensación de surfear los unió desde chicos.

-A la ola – Grita Rafa.

Créditos imagen ABC Mallorca

La ola es magnífica, Borja se posiciona y ve a Rafa a 100 metros de él. En eso siente un susurro:

-Borja, Borja, el faro…. – Le entra un escalofrío, siente que tiene alguien al lado.

-Borja, Borja… - Mira al lado y ve a la mujer de gélidos ojos al lado. Del susto pierde el equilibrio y se cae.

Trata de llegar a la superficie del mar pero siento que algo lo agarra del pie, nuevamente la mujer:

-Borja…. Borja…. Borja… – Lo va arrastrando más profundo. Sacude las piernas para tratar de zafarse  de ella. Cierra los ojos y siente como si estuviera en otro lugar, en un faro, cerca del mediodía, ve un niño correr hacia el mismo:

-Cariño ven, no entres al faro que nos espera tu padre en el auto – La mujer entra al faro y mira para la escalera y lo llamo – Borja, ven acá no me hagas subir…….

De repente, Borja abre los ojos, se ve solo y sube hasta la superficie. Alcanza a ver la tabla y se aferra a ella.

Rafa no se percata de lo sucedido. Una vez que llega a la playa, se da vuelta y no ve a Borja:

-¿Borja? ¡Borja! – Grita.

De repente logra divisarlo a la distancia agarrado a la tabla de surf.

Sale corriendo en búsqueda de Borja:

-Tío que te ha pasado, ¿estás bien? – Borja lo mira.

-Sí, me caí no sé – Esta como desorientado.

-Sostente bien de la tabla.

Se coloca al costado de Borja y empuja la tabla para llegar a tierra firme. Ingresan a la arena:

-Agárrate de mi Borja, ¿puedes caminar?

-Estoy bien Rafa, no te preocupes – Van caminando hasta donde dejaron sus cosas y se sientan.

-Que susto me has dado – Borja le da una palmada - ¿Qué te paso, te mareaste?

Borja mira la arena y no contesta:

-Oye chaval, contesta que paso.

-Me…. Me sentí mal y caí al mar nada más.

-Pero que te dolió algo.

-No, no sé. A lo mejor lo que llevo tanto tiempo sin practicar….

Rafa lo mira sin lograr entenderlo

-Bueno Rafa, no es para tanto. Venga, quedémonos a ver el mar.

Se quedan los dos sentados mirando el mar.

Borja se queda pensando en aquel niño que estaba junto a la mujer llamado Borja. ¿Será ese el mensaje de Alexia?:

-Ahora entiendo.

-¿Entiendes qué?

-No nada, pensaba en voz alta.

Se acercan un par de chicas con unos folletos en mano:

-¡Hola que tal! Los molestamos un momento – Rafa y Borja se ponen las manos sobre los ojos como para lograr verlas.

-¡Hola! – Dicen a coro.

-¿Son de aquí?

-No, de Barcelona – Borja lo mira a Rafa.

-Genial, tenemos una fiesta esta noche para turistas, nos gustaría invitaros.

-Venga, nos encantaría – Toma el folleto Rafa.

-¿Cómo se llaman? Así los anotamos.

-Marc y Pau – Borja mira al cielo y Rafa le pega en la pierna.

-Venga Pau, ahora tenemos plan – Borja se ríe.

-Sí Marc – Con un tono irónico.

-Bueno, los esperamos hasta la noche catalanes.

-Bye – Dicen a coro nuevamente.

Se van las chicas a seguir buscando invitados:

-Oye pásame el papel

Borja lee sorprendido el nombre del evento

-Festa sota la llum del far ……. Alexia….

Continuará.